La mantequilla denominada “dulce” no es dulce propiamente dicho, sino que es la típica y la más común de las mantequillas en España, la que podemos encontrar en cualquier súpermercado. Llamada dulce para distinguirla de la fermentada, que es ligeramente ácida gracias al proceso de fermentación a la que se somete la nata antes de su elaboración receta mantequilla fermentada aquí.
Pocas recetas vas a elaborar más fáciles que la mantequilla casera. Se bate nata líquida de buena calidad hasta que se corta y listo así de simple. Lo que si te recomiendo es que utilices la mejor nata que encuentres, a poder ser sin aditivos ni estabilizantes cuanto mejor sea esta, mejor será la mantequilla. Cuando era niña, me acuerdo de ver en el mercado está mantequilla artesanal, la elaboraban señoras del rural con la nata que extraían a la leche que obtenían de las vacas de casa. Esta mantequilla se llamaba “pela de manteca” o "pella de mantequilla" solían llevarla encima de una hoja de berza.
Tenía un sabor un poco ácido pero untada en pan con azúcar por encima estaba buenísima.
Ingredientes
1 litro de nata para montar
Sal al gusto (opcional) yo no le he puesto
Preparación
1- Ponemos la nata fría en un bol también bien frío batimos con una batidora o procesador de alimentos.
2- Primero se formará nata montada.
3- Seguimos batiendo y se acabará cortando, se formarán unos grumos, ese es el punto que queremos, cuando se separa el suero de la grasa.
4- Aún seguimos batiendo un poco más hasta que se separe todo el líquido, si añadimos sal ese es el momento, damos unas vueltas más para que se integre.
5- Filtramos la mezcla, el líquido es el famoso buttermilk, si no hemos añadido sal lo podemos aprovechar para hacer pan, brioches, etcétera.
6- Lavamos la mantequilla varias veces en agua muy fría, para retirar todo el suero. Lavamos hasta que esta salga transparente.
7- Escurrimos bien y Amasamos en una tabla con una paleta para quitar todo el exceso de agua que pueda tener, esto es importante para que no se estropee tan pronto.
8- Por último le damos forma, y ya podemos envolverla en papel de hornear para conservarla en el frigorífico .
9- Desayunar acompañándola de pan casero y mermelada casera es todo un placer para los sentidos.
A disfrutar
Te vas a chupar los dedos!!
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