La Faba de Lourenzá es una legumbre con Indicación Geográfica Protegida.
Esta espléndida variedad de faba es una de las mejores y de mayor calidad de todas cuantas se producen en España y Portugal.
Una de las más utilizadas en Asturias, para elaborar las fantásticas fabadas que allí se cocinan, sin duda la que más se guisa, ya que absorbe mucho más sabor que las demás variedades una vez elaborada, queda más untuosa y suave que ninguna.
A día de hoy se preparan platos fabulosos con estas fabas, aparte de las típicas fabadas con carne también se hacen con mariscos y pescados tales como los berberechos, almejas, bogavantes, mejillones, etc. Y pescados como el rape y otros.
CÓMO DIFERENCIARLAS
Son de tamaño grande, sobre 19 y 26 mm., y pesan entre 0,8 g. y 1,2 g. por faba.
El cultivo de las fabas de Lourenzá se realiza entre los meses de mayo y junio, con simiente certificada. La recolecta se hace entre finales de agosto y finales de noviembre. Pero al poder conservarlas secas las encontraremos en el mercado durante todo el año.
El área de cultivo de este producto, que está amparado por la Indicación Geográfica Protegida, engloba la Mariña lucense, ósea la costa de la provincia de Lugo, que es una comarca natural que engloba los municipios de: Alfoz, Mondoñedo, Burela Barreiros, Cervo, Foz, Lourenzá, Ourol, Pontenova (A), Ribadeo, Trabada, Valadouro (O), Vicedo (O), Viveiro y Xove.
HISTORIA E INFLUENCIA ASTURIANA
El Ayuntamiento de Lourenzá tiene documentado que a lo largo de los últimos siglos los intercambios de mercancías se producían en esta zona. La economía de la zona estuvo así establecida por la realización habitual de ferias de ganado y productos agrícolas.
Hay documentos del siglo XVIII que adjuntan noticias sobre la actividad
comercial del municipio.
El mercado de fabes de Lourenzá está acreditado desde el siglo XVIII, como recoge el Archivo de Geografía General del Reino de Galicia:
"La producción agrícola es de lo más vario y selecto, como corresponde a un terreno tan fértil y ameno. Desde las plantas tropicales hasta las propias de climas templados, y aun fríos, todo se cultiva aquí, pudiendo afirmarse sin exageración que es el valle de Lourenzá el jardín de la provincia (...); que en 1787 existían (...) fanegas de alubias (...)."
INGREDIENTES
(cuatro personas)
• 1 kg de fabas de Lourenzá
• 3 morcillas de cerdo
• 3 chorizos
• 800 g de panceta al punto de sal
• 150 g de tocino de la barriga
• 2 dientes de ajo
• 1 cebolla grande
•Aceite
• Sal
• Perejil
• Azafrán
PREPARACIÓN
1- La noche anterior, ponemos las fabas a remojo en agua fría.
2- En una cazuela grande, ponemos las fabas de Lourenzá la panceta, las morcillas, los chorizos, el tocino, la cebolla y el ajo picados menudos, el perejil y un chorro de aceite de oliva.
3- Cubrimos con agua fría, ponemos al fuego medio, espumando varias veces. Cuando empiece a hervir, bajamos el fuego y dejamos cocer lentamente con la cazuela medio tapada, procuramos que las fabas estén siempre cubiertas de agua, para que conserven la piel.
4- El hervor debe ser lento y sacudimos la cacerola a menudo, para que no se peguen. Tambien asustamos las fabas unas tres veces, esto consiste en romper el hervor de vez en cuando añadiendo un poco de agua fria A media cocción, sazonamos con las hebras de azafrán ligeramente tostado y muy picado.
5- No salamos hasta el último momento, probando primero, ya que los ingredientes tienen bastante sal.
6- Si la salsa estuviera muy líquida, trituramos unas pocas fabas e incorporamos a la cazuela.
7- Para servir, pasamos las fabas a una sopera y el compango los cortamos en trozos, después lo colocamos en una fuente para que cada uno se sirva a su gusto.
Buen provecho!!